En el sentido más amplio, el término “Internet de las cosas” abarca todo lo relacionado con Internet, pero se utiliza cada vez más para definir objetos que “hablan” entre sí, es decir, son capases de transmitirse información, analizarla y crear una acción determinada para ayudar a alguien con una tarea en particular, o aprender de un proceso. La Internet de las Cosas, una gigantesca red de dispositivos conectados, se está expandiendo cada vez más y se prevé que habrá 8.400 millones de artículos conectados en línea a finales de este año

El Internet de Cosas (IOT) dentro del marketing digital es un “producto” particularmente dinámico y de rápido cambio, que al ser relativamente nuevo resulta realmente interesante el proceso educativo que se debe hacer en términos de mostrar a los clientes potenciales acerca de lo que el IOT realmente es , y lo que podría significar para ellos.

Con esta tecnología es posible, obtener datos de los usuarios en el tiempo real , permitiendo que las empresas obtengan más información y, por consecuencia, identificar y segmentar mejor sus consumidores mediante el análisis de los datos, y así ofrecer contenido.

El IOT crea una nueva relación entre las marcas y sus clientes. Presenta oportunidades para que los vendedores utilicen información rica y poderosa basada en los patrones de comportamiento, interés e incluso felicidad, para comprender mejor la intención de sus usuarios. ¿El resultado? Una relación de dos vías beneficiosa tanto para las marcas como para los consumidores.

     IOT nos ofrece la oportunidad de ser más eficientes en cómo hacemos las cosas, ahorrándonos tiempo y dinero. La calidad y el alcance de los datos a través de Internet de las Cosas genera una oportunidad para interacciones mucho más contextualizadas y receptivas con los dispositivos para crear un potencial de cambio.

Hoy en día, los vendedores tienen una fuerte capacidad de entender qué, cuándo, cómo y dónde – pero el por qué es a menudo una conjetura educada. Sin embargo, con los datos crecientes de billones de dispositivos conectados, los vendedores pueden ahora entender por qué con una exhibición más exacta de patrones de comportamiento del usuario. Si estos datos se utilizan con eficacia, los vendedores tendrán un conocimiento sólido de las intenciones de compra de sus clientes, lo que permitirá  miles de dólares ahorrados en publicidad irrelevante.

Sin  necesidad de marketing especializado

Con más información las marcas tienen más oportunidades dirigir la publicidad al consumidor en el momento más indicado. Es así, las empresas no tienen que adaptarse a complejas estrategias de Marketing, permitiéndoles crear sus procesos propios y modelos de negocio.

La proximidad con los consumidores, mejorará la experiencia de compra y consumo del usuario, así como redefinir los patrones de segmentación con una introducción de la prestación individual de los comportamientos y necesidades.

En fin, podría afirmar que tu vida con el Internet de las Cosas, esto es, ¡todo tipo de información y análisis al alcance de tus manos!